AMORES EN EL CEMENTERIO - RAFAEL SÁNCHEZ ARMAS

CARIÑO POLVO SERÁS

Nieves Concostrina Villarreal es una periodista especializada en la historia del más allá. Momias guanches (canarios prehispánicos), esquelas como Dios manda, secuestro de cadáveres, funerales temáticos en Las Vegas, difuntos enterrados con el teléfono celular, huesos judíos y musulmanes, ataúdes de doble fondo, cementerio indio en Miami, robo de joyas en tumbas, agencia matrimonial en una funeraria, Día de Difuntos en Guatemala... Esta bella mujer es un pozo de sabiduría mortuoria, y además está en manos de un psicólogo para dejar el vicio del tabaco. Que Dios la bendiga.

LUJURIA CON UN HOMBRE TIESO

"Una mujer de 37 años tendrá que verse con la justicia sueca por mantener relaciones sexuales con un esqueleto humano. Es más, podría acabar en prisión por perturbar la paz de los muertos, según ha informado la fiscal del caso. La policía encontró un esqueleto humano, calaveras y una caja con huesos humanos en su hogar, tras recibir una llamada de teléfono que alertaba de un disparo en esa casa, en la ciudad de Gotemburgo. Los agentes hallaron varios CD-ROM titulado "Mi primera experiencia", así como fotografías de la mujer en varios actos sexuales con el esqueleto. La mujer será también acusada de vender huesos humanos a un artista de Uppsala el pasado verano. El juicio tendrá lugar la semana próxima y la pena puede ser de dos años de prisión si es considerada finalmente culpable". Dos años de cárcel

SORDOMUDO AHORCADO POR AMOR

"Desesperado porque su novia lo abandonó, un sordomudo de la colonia Los Pinos se suicida; el sábado hizo el primer intento y ayer lo consiguió. La tarde del sábado intentó matarse, pero sus familiares lo encontraron colgando de un árbol y lo condujeron rápidamente a la sala de urgencias del Hospital General "Doctor Alfredo Pumarejo". Sergio Muro Sosa, de 17 años, quería matarse porque su novia lo había "cortado". Fue dado de alta y regresó a la casa ubicada en la calle Sabinos entre Jaras y Nogales número 7, de la colonia Los Pinos. Y lo volvió a intentar, pero en esta ocasión no contó con suerte pues cuando lo descubrieron ya no había nada que hacer. Muro Sosa era sordomudo y uno de sus hermanos, Ricardo, de 15 años, que padece las mismas discapacidades, fue el que lo encontró ayer poco después de las dos de la tarde colgando de la viga. Paramédicos de la Cruz Roja llegaron al lugar y dictaminaron cadáver a Sergio, pero además condujeron a Ricardo a la sala de urgencias del Hospital General "Doctor Alfredo Pumarejo" porque se causó heridas en los puños al quebrar la ventana para poder entrar al cuarto en el que estaba el suicida. Al descolgar a Sergio Muro lo recostaron en la cama y precisamente en ese sitio dio fe el fiscal quinto José Alfredo Rodríguez. En la cabecera de su cama estaba un enorme cuadro del luchador John Cena y en los pies otra figura monumental de la Santísima Muerte. Sobre un folleto religioso estaba escrito: "I love Sarahí", aunque también hay anotadas unas maldiciones en inglés. El representante social ordenó que el cuerpo fuera trasladado al Servicio Médico Forense, aunque todo hace indicar que se trató de un suicidio y no hay delito qué perseguir". I love Sarahí.

VELATORIO TÍPICAMENTE PORTORRIQUEÑO

"Otro joven se unió a los noveles velatorios que han impactado al país desde el memorable individuo conocido como el "Muerto Parao" ya que pidió que fuera velado recostado de una pared, simulando que estaba de pie. En esta ocasión Héctor Omar Román, de 24 años, fue velado montado en su motora, ataviado de el "jacket" que solía vestir cuando iba en el vehículo de dos ruedas. Según informó Rosa Rodríguez, empleada de la funeraria Carolina Memorial, el joven había pedido, en vida, ser velado de esta forma ya que le apasionaba correr en su motora. Román fue velado desde ayer a la 1:00 p.m. y hoy a las 10:00 a.m. será enterrado. Se informó que, como parte de los arreglos para el entierro, ya el joven fue sacado de la motora y colocado en el ataúd". Velorio sobre ruedas.

MATRIMONIO CON SU NOVIO TIESO COMO LA MOJAMA

Vestida de blanco y ramo de flores en mano, una mujer francesa se casó con su novio, fallecido un año antes, en un enlace que servirá para que ella y sus hijos puedan utilizar el apellido del marido, explicó este jueves el alcalde que ofició la ceremonia. «El 25 de noviembre de 2008 me dijeron que querían casarse y me pidieron que me ocupara de las nupcias. Él murió dos días después en un accidente de tráfico», recuerda Christoph Caput, primer edil de la localidad de Dommary-Baroncourt en la que el pasado sábado Magali Jaskiewicz contrajo matrimonio con el difunto Jonathan George. Ella vestida de novia y él con camiseta blanca -según aparecía en la fotografía que acompañó a su amada durante la tétrica ceremonia- celebraron un casamiento que no dejó espacio para la fiesta nupcial. «No estoy de humor para hacer una fiesta. Vamos a tomar un café y a dar las gracias a los que me han apoyado», explicaba la prometida a la prensa. Magali, de 26 años, podrá ahora adoptar el apellido George de su marido -como es tradición en Francia- pero no tendrá derecho a recibir una pensión pues el matrimonio «no tiene ninguna consideración financiera», aseguró el alcalde. De hecho la novia se convirtió directamente en «viuda» sin pasar por la etapa en la que la mujer debería de haber disfrutado del estatus civil de «esposa». El enlace servirá además para que Magali, que lleva tatuado en el brazo el rostro del que fue su compañero durante seis años y con quien tiene dos hijos, pueda conceder el apellido de éste a los niños, de tres años y 18 meses. Se trata de un evento «extraño», reconoció el regidor, aunque legal, ya que desde el Ayuntamiento se envió un dossier al jefe del Estado, Nicolas Sarkozy, quien dio su consentimiento para que tuviera lugar el casamiento. «Fue una ceremonia muy corta. Sólo leí el decreto que había enviado el presidente y le pregunté (a la novia) si deseaba casarse», resume Caput, quien recuerda que la familia del difunto esposo estaba presente en el enlace a través de la figura de su hermana, que ejerció de testigo de boda". Hasta que la muerte nos separe.