ISABEL CRISTINA ZULETA VS ÁLVARO URIBE HIDROITUANGO

ISABEL CRISTINA ZULETA UNA HEROÍNA COLOMBIANA
ÁLVARO URIBE VÉLEZ EN EL PUNTO DE MIRA

El proyecto de construir la central hidroeléctrica Pescadero-Ituango en el río Cauca se formalizó a finales de la década de 1990. Desde el principio ha estado marcado por la destrucción de pueblos y aldeas; el desplazamiento de la población y la estela de la muerte. Wiliam de Jesús Gutiérrez Nohava, dirigente de la Asociación de Mineros y Pesqueros Artesanales de Puerto Valdivia, denunció la presencia en agosto de 1997 de paramilitares del Bloque Mineros con la orden del "Patrón" de matar a los habitantes si no se marchaban del territorio. La socióloga Isabel Cristina Zuleta López ha identificado a Álvaro Uribe Vélez, a la sazón gobernador de Antioquia, como el "Patrón" mencionado por los asesinos de las Autodefensas Unidas de Colombia. La masacre se produjo dos meses después. Casi 200 paramilitares dirigidos por "Cobra" (paramilitar mencionado por Wiliam de Jesús Gutiérrez Nohava) y con la complicidad de la Fuerza Pública batieron la región desde Puerto Valdivia hasta el corregimiento de El Aro, donde la guerrrilla presuntamente ocultaba a Mario Uribe Escobar, primo de Álvaro Uribe Vélez, según declaró Francisco Enrique Villalba Hernández, más tarde asesinado "sospechosamente" como tantos otros testigos. Desde un helicóptero de la Gobernación de Antioquia, presuntamente Álvaro Uribe Vélez, observaba la incursión de los paramilitares. Campesinos muertos, casas incendiadas, mujeres violadas. El balance de la "operación" con la complicidad de la IV Brigada del Ejército se completó con el saqueo de tiendas y bodegas y el robo de centenares de cabezas de ganado. La hija de Elvia Areiza Rosa Barrera, sirvienta en la casa del cura, nunca olvidará lo sucedido. Estaba recogiendo la ropa tendida en el patio cuando vio pasar a su madre conducida por paramilitares. Luego se la llevaron a ella y la condujeron a una casa donde la violaron. El primero en hacerlo fue "Cobra". Su madre corrió la misma suerte pero nunca pudo contarlo. Tiempo después encontraron su cuerpo desnudo en un cercado. Isabel Cristina Zuleta López abandonó la región. Durante varios años estuvo viviendo en Medellín, donde estudio sociología. Una década más tarde regresó a Ituango y descubrió el trasfondo del masivo desplazamiento humano de la región por encargo del "Patrón". Había comenzado la construcción de la mastodóntica central hidroeléctrica. Si primero fueron los paramilitares, cuando ella contaba apenas 14 años de edad, quienes la desplazaron, ahora estaba amenazada por el ESMAD (Escuadrón Movil Antidisturbios) de la policía. Golpes, amenazas, impunidad. Silencio "administrativo" en la prensa de la oligarquía antioqueña. Soledad de los pobladores en la tortura psicológica y el atropello físico. En 2013, dos miembros del Movimiento Ríos Vivos, fundado, entre otros, por Isabel Cristina Zuleta López, fueron asesinados en medio de una campaña de vigilancia, hostigamiento y calumnias. Isabel Cristina Zuleta López ha sido acusada de guerrillera y su casa allanada en varias ocasiones. Se ha enfrentado a un monstruo por las graves irregularidades descubiertas a raíz de la catástrofe ocurrida en la cuenca del río Cauca por la construcción de la central hidroeléctrica sin tener en cuenta las fallas geológicas de la región. El desastre ha dejado sin trabajo a campesinos, baraqueros (buscadores artesanales de oro en el río Ituango), pescadores, arrieros, comerciantes. La población está sin trabajo y sin vivienda por el peligro continuo de deslizamiento de tierras. Viven en albergues provisionales. El Consejo de Estado ha admitido a trámite la demanda de Isabel Cristina Zuleta y otros afectados con la intención de paralizar las obras. Isabel Cristina Zuleta López corre peligro de muerte. El mundo debe saberlo porque la impunidad en Colombia ronda el 90 por ciento de las denuncias.

El paramilitar "Cobra" tras su "hazaña" en la masacre de El Aro recibió los honores de los "comandantes" Carlos Castaño Gil y Salvatore Mancuso Gómez, respectivamente. Este último, años después, y fruto del Pacto de Ralito entre Álvaro Uribe Vélez y los paramilitares, concretado en la Ley de Justicia y Paz (ni una cosa ni la otra por cuanto la pena máxima para cualquier delito cometido por las Autodefensas Unidas de Colombia, desde crímenes de guerra hasta delitos de lesa humanidad, quedó fijada en ocho años de cárcel o casa por cárcel), pronunció un discurso en el Congreso de la República para deshonra del presunto Estado de Derecho y la vergüenza de los sicarios por omisión informativa del Cartel Mediático Parauribista:

Yo, Salvatore Mancuso, me presento ante ustedes ilustres compatriotas, Honorables Senadores y Representantes de la República, investido por mis compañeros de causa del Movimiento Nacional de Autodefensas, como Jefe del Estado Mayor. Soy creyente en Dios, en el Dios de la Esperanza, del Amor y del Perdón (....). Hoy acudo conmovido al histórico recinto del Congreso de la Repúlbica, donde se mantiene viva la llama sagrada de la libertad que nos legó el Libertador Simón Bolívar (...). Vengo en irrenunciable misión de paz desde Santa Fe de Ralito, donde, con la bendición de la Iglesia Católica y el apoyo de la OEA, de la comunidad internacional, del gobierno del Presidente Álvaro Uribe Vélez y del Pueblo Colombiano, dimos inicio a este histórico proceso de paz (...). Salvatore Mancuso Gómez en el Congreso de la República.

Ha corrido mucha agua debajo del puente desde entonces y Salvatore Mancuso Gómez, preso en una cárcel de EEUU, sigue esperando la llegada de Álvaro Uribe Vélez. Pero nunca lo verá con un mono de color naranja porque el "Patrón del Ubérrimo" es el Bin Laden de EEUU antes de tumbar las Torres Gemelas (si el cabecilla de Al Qaeda no se hubiera revirado contra sus promotores frente a las tropas soviéticas en Afganistan, jamás hubiera perdido la vida). Álvaro Uribe Vélez no seguirá los pasos de Bin Laden porque es un fascista de cuna. A propósito de la amañada extradición de Salvatore Mancuso a EEUU ordenada por Álvaro Uribe es necesario echar mano de la memoria para refrescársela a los deschavetados e ilustrar a quienes, en el 2008, estaban saliendo del cascarón.

Álvaro Uribe Vélez asumido por los paramilitares como el "Patrón" de las Autodefensas Unidas de Colombia pactó en Santa Fe de Ralito la "paz de los cementerios". Los paramilitares dejaban las armas y el "Patrón" a través de la Ley de Justicia y Paz blanqueaba su historia de crímenes de guerra y delitos de lesa humanidad a cambio de ocho años de cárcel, hasta dar el salto a la política a través de la Corporación Democracia dirigida por Giovanni Jesús Marín Zapata, lugarteniene de "Don Berna" Diego Fernando Murillo Bejarano, culpable de la caída en desgracia del general Mauricio Santoyo Velasco cuando Álvaro Uribe Vélez traicionó a los "comandantes" de las AUC. El entonces director de la DIPOL (Dirección de Inteligencia Policial), general de brigada Guillermo Julio Chaves Ocaña, descubrió los tejemanes de los paramilitares recluidos en la prisión de Itagüí y lo filtró a la prensa. El escándalo puso a Álvaro Uribe Vélez contra las cuerdas, y decidió con la astucia de un zorro la inmediata extradicción a EEUU de todos los principales "comandantes" desde "Don Berna" hasta Mancuso para quitarse de encima a semejantes testigos incómodos. Pero de nada le sirvió la treta porque los extradidatos empezaron a desembuchar y denunciaron los vínculos de políticos, empresarios y militares con las Autodefensas Unidas de Colombia. Desde entonces, Álvaro Uribe Vélez, ha sido llamado a indagatoria en un montón de procedimientos judiciales. Sólo su pragmático servilismo vendiendo Colombia a EEUU lo ha salvado de la Corte Penal Internacional.