Señor Presidente de la República de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón es Gay, saque a Colombia de la caverna del fascismo; si no, continuará siendo un Estado Fallido (en América sólo aventajada por Haiti y en el mundo por Somalia y Afganistan), un peligro para la supervivencia de sus conciudadanos y la seguridad en la región. Derechos Humanos, señor Presidente, Derechos Humanos. Ese es el talón de Aquiles de la narcodemocracia colombiana. Un país tan rico en recursos naturales y sin embargo con tanta pobreza, desigualdad, injusticia. El caldo de cultivo de la revolución y la guerra.
Señor Presidente, casi doce años después entono el mea culpa por haberme seducido la falsa idea de la regeneración democrática de Colombia. No me arrepiento de haber criticado a la guerrilla por sus crímenes atroces ni haber redactado la querella contra Andrés Pastrana Arango.... pero me faltaba conocer la otra cara de la moneda... ¡¡El tenebroso narcoparamilitarismo!! Un día, paseando por los jardines de la Escuela de Policía en La Estrella (Antioquia), con el más tarde general Guillermo Julio Chaves Ocaña y director de la DIPOL (Inteligencia de la Policía) cuando estalló el escándalo por las grabaciones policiales a los "comandantes" narcoparamilitares presos en la cárcel de Itagüí, repudió la existencia del narcoparamilitarismo comparándolo por su brutalidad y fines con la guerrilla. No todos los policías y militares colombianos han sido pro Autodefensas Unidas de Colombia, aun cuando sin el apoyo del Ejército el narcoparamilitarismo jamás hubiera existido. Paramilitares guardándole las espaldas a la oligarquía hacendada mientras desmembraban a los campesinos humildes para robarles las tierras.
Don Berna y Marín Zapata entraban y salían del cuartel general de la IV Brigada del Ejército como Pedro por su casa, como también el ex alcalde de Rionegro y senador y aspirante a la presidencia de la Gobernación de Antioquia Rubén Darío Quintero Villada (más tarde enjaulado). La información la obtuve de un oficial de Inteligencia del Ejército. Años después ocupé temporalmente una vivienda pared con pared con el otrora apartamento alquilado por Marín Zapata en la calle 50 de Medellín, muy cerca de la plaza (mercado) de Florez. Por supuesto de la "desmovilización" falsamente pactada con el gobierno de Uribe Vélez (Marín Zapata y Fabio Orlando Acevedo Monsalve estamparon su firma en el "acuerdo de paz" en representación del Bloque Cacique Nutibara) nada de nada. Poco más tarde estalló el escándalo de la desclasificación del informe de la DIA (Inteligencia Militar USA) clasificando a Álvaro Uribe Vélez como el número 82 de los narcotraficantes colombianos en tiempos de Pablo Escobar Gaviria (número 79). ¿Cómo seguir confiando en Colombia? No regresé hasta el año 2009 coincidiendo con la celebración de la Quincuagésima Asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo. Según la prensa, Medellín había pasado de ser una ciudad violenta a la copia de Copenhague o Estocolmo. Típica fantasía paisa. Continuaba existiendo la extorsión de las cooperativas CONVIVIR (un sinvivir para los "desechables" como son conocidos los indigentes, prostitutas y homosexuales) a los comerciantes y transportistas bajo el paraguas de la "seguridad" ciudadana. Las balaceras en las comunas alumbraban la noche como si fuera Belén antes del nacimiento del Niño Jesús. Más de 5.000 policías y militares tomaron la ciudad. Los indigentes fueron desplazados (a bordo de camiones de la policía) a los municipios contiguos y los habitantes de las comunas más conflictivas necesitaban superar un férreo control de la Fuerza Pública para trasladarse a la zona centro de la ciudad a comprar o trabajar. Las personalidades extranjeras pudieron caminar a sus anchas dentro del gigantesco perímetro vallado. También subir en el telesférico rodeado de policías armados hasta los dientes para ver desde los cerros la espectacular panorámica del Valle del Aburrá. Nadie con quien hablé mientras estuve en Medellín apostó ni un peso por la recuperación económica y social de Colombia. La emigración contiuaba estando en la mente de muchos como medio para sortear la zozobra, sin trabajo, sin servicios sociales, sin Derechos Humanos. En Cartagena de Indias me tropecé con un panorama mas aterrador todavía en los barrios humildes. En La Popa, ni la policía osaba entrar, hasta la intervención de la Infantería de Marina. Pero ni así cesaron los asesinatos. Pobreza y delincuencia, las dos caras de la misma moneda, y barcos atestados de turistas extranjeros cruzando la bahía de Cartagena de Indias, y presencia exultante del narcoparamilitarismo. ¡¡Colombia!!
Señor Presidente de Colombia, en mayo pasado abrí una cuenta en twitter con el nombre de @RSanchezArmas para enlazar con mi pagina agenciabk.net No gustó mi pregunta sobre el narcoparamilitar "desmovilizado" Giovanny Jesús Marín Zapata. En un santiamén se desencadenó una campaña de acoso y derribo contra la cuenta. El cibersicariato pro Álvaro Uribe Vélez empezó a "reportarla" como "spam" sin yo haber cruzado ningún mensaje con dichos cibersicarios. El aluvión de quejas a twitter dio resultado y me quedé sin cuenta. Abri otras para denunciar lo sucedido y para seguir preguntando por Marín Zapata y de nuevo trataron de sabotearlas, con unas lo consiguieron y con otras no. A la vista de lo segundo el cibersicariato abrió varias cuentas falsas con mi nombre y fotografía. La primera suplantación conseguí anularla, pero las siguientes ni lo he intentado porque no haría otra cosa entonces. Se ha de aportar una serie de datos por telefax para cada suplantación. ¿Se imagina la broma de pedir la nulidad de cinco cuentas, diez, veinte cada día? Los ciberterroristas (colombianos y delinquiendo desde Colombia) han creado varias cuentas falsas denigrándome: @RSanchezArmas_, @RSanchezAnal, @RSanchezArmasGay... Ahora mismo mantienen tres en activo. Estos "buenos muchachos" fieles representantes del nazismo no sólo no me han permitido mantener mi cuenta primigenia, sino que tampoco aceptan que tenga otras. "¡¡Por Dios!! Soy discrepante político pero defensor de las libertades" (Álvaro Uribe Vélez). Como no me he amilanado ante semejante guerra psicológica, ya hablan de convertirme en un "objetivo militar". Esa comunicacion se ha producido (sin discreción de ningún tipo, abiertamente) entre una ciberterrorista pro Alvaro Uribe Vélez y la esposa del abogado inhabilitado por la Procuraduría General de la Nación Miller Soto Solano. El asunto me preocupa dada su presunta relación con el "comandante" narcoparamilitar "Jorge 40" (Rodrigo Tovar Pupo) como reveló él señalando los presuntos vínculos del narcoparamilitarismo con el Concejo de Barranquila cuando Miller Soto ocupaba la presidencia.
Señor Presidente de Colombia, no estoy de brazos cruzados, pero a su gobierno le corresponde investigar la existencia o no de un plan de asesinato, nada improbable a la vista de la brutal campaña de guerra sucia desatada por el cibersicariato pro Álvaro Uribe Vélez. Discúlpeme la broma de tú también puedes ser gay. ¿Se imagina ver su nombre por todas partes con semejante "bromita" del III Reich Uribista? ¿Debo ser más tolerante? Vea a continuación tres botones de muestra, tres cuentas con mensajes a todas partes. No me lo jure, sentirá usted un asco infinito de ser el presidente de esos fascistas. La sanción de la Ley de No Discriminación en Colombia está a la vuelta de la esquina. A partir de ese momento será delito un comportamiento como he soportado yo durante cinco meses. Mientras tanto ordene la investigación del posible atentado. Mañana registraré oficialmente en el Consulado de Colombia este escrito para su traslado a la Casa de Nariño y la copia sellada la depositaré ante la autoridad española competente.
CREACIONES ARTÍSTICAS DEL III REICH
HURRIBLE ALENTANDO LA GUERRA SUCIA
ALVARITO NO ESCUPAS PARA ARRIBA
UNIVERSIDAD CONTRA LA CALUMNIA
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AGENCIA BK DETECTIVES ASOCIADOS