CRÓNICAS DE RAFAEL SÁNCHEZ ARMAS
"Mariconsón, capicúa, pájaro tatarita, ex seminarista sacado del armario, inmoral sexual, pestilente de pluma, afeminado de Las Palmas, moroso, bujarrón".
Por tales injurias publicadas en un periódico canario de la isla del oeste contra el periodista Carlos Ramón Sosa Báez (novio de la jueza española María Victoria Rosell Aguilar titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria), también conocido de forma simpática como Anacleto (según el periodista Francisco Javier Chavanel Seoane) o Sherlock Holmes (según el periodista Andrés González de Chaves Sotomayor), dicho periodista demandó a los propietarios del diario "oestiño" por 300.000 euros de indemnización. Victoria Rosell Aguilar intervino como testigo. Ninguna objeción porque el ofendido estaba amparado por el artículo 18 de la Constitución Española (derecho al honor) y el artículo 24 del mismo texto constitucional (derecho a la tutela judicial efectiva).
CIBERSICARIATO PARAMILITAR COLOMBIANO
TERRORISMO PSICOLÓGICO
I PARTE
¿Jueza implacable con los derechos de su novio y negligencia con mi denuncia contra el cibersicariato paramilitar colombiano dirigido por el terrorista
Carlos Arturo Escobar Marín? ¿Por qué lo hizo? ¿Quizá como venganza aprovechando su condición de "jueza inamovible" propia de la casta judicial por su revés en la trama urdida contra mí por el "estado mayor" del PSOE en Las Palmas de Gran Canaria?
Sucedió poco después de regresar yo a la siciliana isla de Gran Canaria (mi patria, la patria del guerrero Doramas) después de cuarenta años de ausencia. DON Jerónimo Saavedra Acevedo (una "vaca sagrada" por haber desempeñado toda clase de cargos tanto en las Cortes Generales y en la Administración del Estado como en las instituciones de la colonia) ocupaba la alcadía de Las Palmas de Gran Canaria. ¿Quién ordenó perseguirme desde los servicios municipales? DON Jerónimo Saavedra Acevedo, en otros tiempos "amigo" de la
Organización de Usuarios de la Justicia, siendo ministro de Administraciones Públicas, me escribió:
"En este 23 de abril de 1994, festividad de Sant Jordi, quiero expresar unas palabras de aliento en favor de aquellas asociaciones que, como la Organización de Usuarios de la Justicia (OUJ), contribuye de forma decisiva a vertebrar y dinamizar una sociedad tan compleja como la nuestra. Hoy conmemoramos también esa fecha en la que, con el aniversario de Cervantes, celebramos la inclusión del libro en nuestra realidad social. El libro, la palabra escrita, se erige en monumento esencial de respeto y civilización. El respeto mutuo, el diálogo y la renuncia a la violencia constituyen ejes fundamentales de toda sociedad civilizada. Estos planes esenciales de funcionamiento colectivo tienen en los libros y en la Administración de Justicia dos vías relevantes de transmisión. Una sociedad leída, ilustrada y culta es más proclive a la crítica constructiva y a la denuncia responsable de toda injusticia social y económica que una sociedad iletrada y analfabeta. La Administración de Justicia se convierte de esta manera en un punto de referencia inevitable para toda persona que confía en una solución civilizada y pacífica de las diferencias que puede dirimir con otra persona o colectivo social. En suma, la Justicia, como diría Loewenstein, se concibe como piedra angular de todo Estado democrático, como instancia que garantiza y protege los derechos fundamentales de la persona, cuya conquista histórica es necesario recordar y preservar. Una conquista en la que muchos narradores, pensadores, intelectuales, poetas, filósofos, historiadores y sociólogos recurrieron a la letra impresa para dejar constancia de unas aspiraciones, hoy día elementales en toda democracia, pero cuya plasmación real en textos con valor jurídico y político ha exigido la sucesión de muchas generaciones. Mantener tales derechos, velar por su integridad a través de una justicia democrática y consolidad así la sociedad civilizada que prefiere el libro a la pistola, representan objetivos loables. En esta línea se incardina el trabajo de la OUJ. A ellos les dedico, afectuosamente, esta reflexión, con mis mejores deseos para el porvenir común".
¿Por qué DON Jerónimo Saavedra Acevedo, quince años después, me convirtió en un enemigo a batir simplemente por hacer uso de la palabra a través de mis críticas en esta humilde página en internet? Tras un año tragando quina mandó a un testaferro suyo (ex delegado en Canarias del Gobierno de Rodríguez Zapatero; director del gabinete del ayuntamiento de LPGC y plumilla del periódico digital de Carlos Sosa Báez en otra época jefe de Prensa del PSOE en Canarias) a la Jefatura Superior de Policía de Canarias (donde según el periodista Francisco Javier Chavanel Seoane, Carlos Sosa Báez se movía como pez en el agua haciendo de chivato del PSOE contra los cabecillas del Partido Popular). ¿Elección a dedo de la jueza Victoria Rosell Aguilar (dada su condición de novia del ex jefe de Prensa del PSOE Carlos Sosa Báez) para "darme" un escarmiento por desafiar a la "vaca sagrada" en Canarias del Partido del GAL? La jueza del ordenador "Vicky la Sandinista", en todo caso, no se pudo prestar a la trama, y terminó archivado aquella sospechosa denuncia.
Paralelamente a las actuaciones practicadas por la jueza Victoria Rosell Aguilar a raíz de la trama urdida en el "estado mayor" del PSOE en Las Palmas de Gran Canaria (cuya federación toma nombre del sátrapa Juan Rodríguez Doreste, alias Juanito), en mayo del 2011, el cibersicariato paramilitar colombiano dirigido por Carlos Arturo Escobar Marín (condenado en EEUU por infiltrar la base de datos del Bank of America; buscado en Venezuela por sabotear el sistema informático de PDVSA y demandado en Colombia por varios trabajadores suyos por incumplimiento de contrato; amén de sus vínculos familiares con el "comandante" paramillitar "Macaco", Carlos Mario Jiménez Naranjo, y la "Reina de la Cocaína", Griselda Blanco Restrepo, sin olvidar la mención de su nombre en sendos libros sobre el narcotráfico colombiano en Argentina) desató, a través de internet (injurias, calumnias, amenazas de muerte, sabotaje a mi cuenta en twitter, coacción a mi proveedor de internet para obligarlo a suspender mi página web, creación de múltiples perfiles falsos y denigratorios con mi nombre y fotografía, y de mi madre fallecida hace veinte años) una brutal campaña de terrorismo psicológico para desacreditar mi testimonio contra los ochos años de corrupción y crímenes de Estado durante la Presidencia de Álvaro Uribe Vélez y por sus vínculos familiares con el crimen organizado (su hermano Santiago Uribe Vélez implicado presuntamente con la banda paramilitar "Los Doce Apóstoles" y su cuñada Dolly Cifuentes Villa, viuda de Jaime Alberto Uribe Vélez, detenida por sus negocios con el capo del Cartel de Sinaloa Joaquín "Chapo" Guzmán Loera; sin olvidar ese informe desclasificado de la Defense Intellgence Agency señalando a Álvaro Uribe Vélez como el narcotraficante colombiano número 82 en tiempos de Pablo Escobar Gaviria).
Algunos ejemplos de la campaña difamatoria orquestada por el cibersicariato paramilitar colombiano:
Un año después de recopilar un aluvión de pruebas sobre la campaña de difamación y amenazas de muerte proferidas impunemente en las redes sociales, el 11 de julio del 2012, denuncié los hechos en el Juzgado de Guardia de Las Palmas de Gran Canaria, toda vez que el dominio rafaelsanchezarmas.es suplantando mi identidad con fines criminales estaba registrado por la terrorista yankee Tonya Geese, testaferro de Carlos Escobar Marín, en un organismo del Ministerio de Industria de España. Por lo tanto la competencia territorial de la Administración de Justicia "patria" estaba fuera de toda duda. Después del reparto de rigor (que no hizo la jueza Victoria Rosell Aguilar con la denuncia del testaferro de DON Jerónimo Saavedra Acevedo, hipotéticamente, con la vana pretensión de "darme un escarmiento" por encargo), mi denuncia recayó en el Juzgado de Instrucción número 8. La jueza titular, Victoria Rosell Aguilar, estaba ausente y el sustituto, Alberto Pueba Contreras, archivó la denuncia "por no ser los hechos constitutivos de delito". Interpuesto el recurso de apelación, la jueza Victoria Rosell Aguilar lo guardó durante un año en una gaveta. Hasta en dos ocasiones me quejé al Consejo General del Poder Judicial por "dilación indebida". ¿Dilación indebida o presuntamente retraso malicioso por haberle ganado el caso del antiguo patrón de su novio Carlos Sosa Báez DON Jerónimo Saavedra Acevedo? ¿Venganza o defensa de los negocios en Colombia de su novio Carlos Sosa Báez? Son especulaciones, pero la realidad es una. La jueza "inamovible" por su condición de miembra de la casta judicial (sin participación democrática del pueblo), intocable ella, se abstuvo de seguir con el caso y pasó los trastos a un tercer magistrado, Florencio Barrera Espinel, que archivó las diligencias por "extemporaneidad". Tres jueces (Alberto Puebla Contreras, Victoria Rosell Aguilar y Florencio Barrera Espinel) dieron "carta blanca" a los terroristas colombianos. ¡Con qué júbilo se burlaron! ¿De mí? No, amiguitos; de España, de ustedes, de la presunta justicia.
No tengo claro el grado de responsabilidad de los magistrados Alberto Puebla Contreras (posiblemente un incapaz que ni él mismo redactara el auto de archivo, sino cualquier oficial del juzgado como se estila en muchas oficinas judiciales) ni de Florencio Barrera Espinel, pero respecto a la jueza importada "Vicky la Sandinista", si alguna vez hubiera justicia en esta colonia (supuesto negado porque en la patria de Doramas ya no hay redaños), Victoria Rosell Aguilar, sometida a un Tribunal Popular, iría derechita a prisión.
Finalmente, un consejo a Pablo Iglesias; suelta lastre a tiempo porque la jueza-diputada Victoria Rosell Aguilar desacredita tu verborrea democratizadora del Estado. Gota a gota se puede llenar un bidón de agua, y yo tengo el bidón, y toda la paciencia del mundo.
CIBERSICARIATO PARAMILITAR COLOMBIANO
TERRORISMO PSICOLÓGICO
II PARTE
Inesperadamente la Fiscalía General de la Nación colombiana se puso en contacto conmigo; más tarde descubrí la trampa porque sólo le interesaba obtener información de Carlos Escobar Marín; no por mi caso, sino por el escándalo del espionaje hecho a la Presidencia de la República por un grupo de piratas informáticos (entre los cuales estaba un español) a las órdenes de Álvaro Uribe Vélez con el fin de tumbar las negociaciones con la guerrilla en La Habana. Me invitaron a viajar a Bogotá para entrevistarme con ellos. "No se te ocurra poner un pie en Colombia" (me advirtieron varios amigos colombianos). "No saldrías vivo del aeropuerto de Bogotá". Además me aconsejaron poner en alerta al Ministerio del Interior español ante un hipotético atentado a la vista del fracaso continuo del cibersicariarto: a pesar de su campaña de difamación no lograban doblegarme. Lo hice y la Secretaría de Estado de Seguridad acusó recibo de mi denuncia.
La reacción del cibersicariato no se hizo esperar. En el servidor godaddy.com, donde el terrorista Carlos Escobar Marín administra tropecientas cuentas, unas de personajes famosos de Colombia y otras fingidas para utilizarlas en su trabajo de esbirro de la guerra sucia, apareció la cuenta masqforo.com, donde se me acusaba de haber sido condenado por abuso de menores. Tras diversas gestiones terminaron eliminando dicha cuenta para no verse obligados a confesar el nombre del administrador. De todas formas un terrorista anónimo del cibersicariato abrió otra cuenta en el portal gratuito wordpress.com, donde se negaron a retirar la calumnia salvo con una orden judicial española.
Había comenzado la segunda parte de la vergüenza judicial española. Infructuosamente denuncié los hechos repetidamente; incluso le solicité al
Tribunal Superior de Justicia de Madrid que emitiera un comunicado desmintiendo ese "comunicado" inexistente, además de poner el caso en conocimiento de la Fiscalía General del Estado por cuanto su mención en esa calumnia le daba apariencia de veracidad. No lo hizo; no lo hizo nadie. Un año después presenté la siguiente
reclamación administrativa en el Ministerio de Justicia previa a la interposición de un contencio-administrativo. La demanda ya ha sido presentada en la Audiencia Nacional. No espero nada de la justicia española (incapaz aún quién sabe con qué ocultas intenciones de exigir a wordpress.com la retirada de esa cuenta por comprometer la credibilidad de una insticución del Estado como es el Tribunal Superior de Justicia de Madrid), pero no me queda más remedio que acudir a la misma como paso previo a demandar a España, bien en el Comité de Derechos Humanos de la ONU, bien en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. En todo caso, muchos años de espera. ¿España, su Estado, puede actuar por venganza? Efectivamente soy un canario rebelde; defiendo el derecho de autodeterminación de vascos y catalanes y en 1995 convoqué, en la Organización de Usuarios de la Justicia, la primera "célula de reflexión" hispanomarroquí para fomentar la descolonización de Ceuta y Melilla. ¿El Estado pretende seguir castigándome a cara descubierta? ¡Pero si España es una democracia europea avanzada!
REQUERIMIENTO AL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DE MADRID
TERRORISTAS COLOMBIANOS Y JUECES ESPAÑOLES HUMILLAN A ESPAÑA
CARLOS ESCOBAR MARÍN CIBERSICARIO DE ÁLVARO URIBE VÉLEZ
____________________________________________________________
AGENCIA BK DETECTIVES ASOCIADOS